Cristian Vera Godoy

Del mismo modo que alimentamos el cuerpo cada día, deberíamos alimentar el amor hacia nosotros mismos, nuestra   autoestima . Tenerla “ desnutrida ” nos irá convirtiendo en personas negativas, agresivas, de ésas que enrarecen el ambiente sólo con su presencia. Hay veces que escuchamos el sabio consejo: “ Deberías quererte más a ti mismo .” Y más de uno se habrá preguntado: “ Pero, ¿cómo se hace eso? ” Para responder a esa pregunta, aquí va una completa pero resumida guía que explica cómo se hace… Usa afirmaciones . ¿Conoces ésa tan popular que dice: “ Porque yo lo valgo “? De ese estilo. Recuérdate que vales muchísimo, porque las pruebas que tienes para demostrar lo contrario (si es que las tienes) son inconsistentes. No te compares  con los demás y te sientas una basura a su lado. Hay psicólogos que sugieren que este hábito es común en las personas con baja autoestima. Céntrate en cómo mejorar tu vida sin tomar como baremo la de otros. No confundas autoestima con ...

Todas nuestras experiencias en la vida, sean cuales fueren, son perfectas y necesarias. Y cada experiencia individual fue creada tal y como debía ser. A las experiencias las podemos juzgar como “lindas” o “feas”, “agradables” o “desagradables”; es propio de la mente limitada pretender entender y, por lo tanto, emitir un juicio de la “parte” descontextualizándola del “todo”. El todo es el telón de fondo y la parte es una parcialidad del mismo. Para ilustrar lo dicho podemos utilizar el ejemplo del rompecabezas. Un buen rompecabezas se compone de cientos y hasta miles de piezas. Si tomamos una o varias piezas y las observamos individualmente, a lo sumo nos puede gustar o no la forma, nos puede gustar o no el color o los colores, algún que otro garabato. Pero no podemos ir más allá. Observando la parte, en el caso de un rompecabezas que lo vemos por primera vez, no podemos saber cuál es el paisaje que esconde. ¡Y suelen ser hermosos! Pero aún teniendo en nuestras manos una pieza, o ...

Sabio no es aquel que tiene la cabeza atiborrada de información, la verdadera sabiduría consiste en poder ser felices en el mundo tal como es, sin pretender acomodarlo tal como a nosotros nos gustaría que fuera. Tu paz interior y tu felicidad dependen de aceptar que no puedes elegir lo que crees que debería ser, pero lo que sí puedes, es elegir como ver aquello que ya tienes. Cuando juzgas como buena o mala una situación, confundes la realidad con tu interpretación de ella. Entonces la paz será imposible para ti porque tendrás tu mente enfocada en conflictos, y por ley de correspondencia, conflictivas también serán las experiencias que el mundo exterior te brinde. La paz nos llega a través de la aceptación. Aceptación que no significa conformarse. La aceptación va encaminada a tolerar que no todo puede ser bueno como lo esperamos, que no todo siempre estará perfecto y será ordenado e irá encaminado como nos gustaría, pero se inclina a la acción, podemos convivir con algo que nos suced...